
El Gobierno Nacional informa a la ciudadanía que, gracias a una operación impecable y sin un solo disparo, fueron liberados los 57 militares que habían sido secuestrados en el municipio de El Tambo, Cauca. La operación fue llevada a cabo con éxito por las fuerzas conjuntas del Ejército Nacional, la Fuerza Aérea Colombiana y la Policía Nacional, luego de que los captores se negaran a establecer un diálogo con la Defensoría del Pueblo y con organismos internacionales.
Desde el inicio, el Estado colombiano sostuvo que no cedería ante el secuestro ni permitiría que este acto criminal atentara contra la institucionalidad y la seguridad del país. La misión fue ejecutada con planeación estratégica, precisión operativa y una ética inquebrantable, incluso en medio del caos, el riesgo y la incertidumbre.
Durante la operación, varios de los presuntos responsables del secuestro extorsivo fueron capturados, enfrentando cargos que podrían representar penas de entre 25 y 40 años de prisión. Las autoridades judiciales han sido enfáticas: los hechos delictivos derivados de la forzada salida de la Fuerza Pública en esta zona tendrán consecuencias penales adicionales.
Legitimidad, firmeza y respaldo total a la Fuerza Pública
La voluntad de paz del Gobierno no contradice la misión constitucional de nuestras Fuerzas Armadas. Por el contrario, se reafirma el compromiso con el desmantelamiento de toda estructura criminal que infunda terror y muerte en nuestras comunidades.
El Estado no abandonará a su pueblo. Se hace un llamado a las comunidades a no dejarse instrumentalizar por grupos ilegales, a abandonar los cultivos ilícitos y a sumarse a los programas de legalidad y desarrollo que ofrece el Gobierno. La línea 147 del Ejército Nacional y el número 107 están habilitados para recibir denuncias e información sobre actividades delictivas.
Un mensaje de honor y compromiso
“Durante 35 años, serví en el campo de batalla. Sé lo que significa defender a Colombia con el cuerpo y el alma. No me doblego. Por nuestros héroes y heroínas entregaré todo lo mejor de mí, para que cumplan con honor su sagrada misión: proteger la vida, la libertad y la democracia de nuestro pueblo”, afirmó el Ministro de Defensa Nacional, quien destacó el profesionalismo y la valentía de cada uno de los uniformados involucrados en la operación.
Colombia está cansada del terror. Hoy más que nunca, la Fuerza Pública cuenta con el respaldo total del Estado y del pueblo colombiano.
¡Dios bendiga a nuestros soldados y policías!