La Superintendencia Financiera informó que la tasa de usura para febrero de 2024 será de 34,97 por ciento, una reducción de 1 punto básico en comparación con la que se fijó para enero (34,98 por ciento).
El tope que los bancos podrán cobrar a los consumidores por sus créditos sigue bajando. La Superintendencia Financiera definió, por medio de la Resolución 0150 de 2024, que la tasa de usura para febrero se ubicará en 34,97 por ciento.
Este ajuste mantiene la tendencia a la baja que ha traído la tasa de usura en los últimos meses y se traduce en una reducción de 1 punto básico (0,01 puntos porcentuales) en comparación con el tope que se definió en enero (34,98 por ciento).
Aunque la reducción fue ligera, esta tendencia a la baja resulta clave para los consumidores pues establece el valor máximo en intereses que le pueden cobrar los bancos a los consumidores que tienen una obligación financiera.
La Superintendencia Financiera certifica todos los meses los intereses corrientes para los diferentes tipos de créditos, y a partir de estos se calcula la tasa de usura. Esta se calcula multiplicando por 1,5 veces el promedio de las tasas de interés que cobraron los bancos durante el mes anterior.
Con la decisión que tomó el Banco de la República en diciembre de comenzar a reducir la tasa de interés de referencia, se espera que las tasas de los créditos del mercado continúen bajando. En diciembre la junta directiva del Banco de la República decidió recortar en 0,25 puntos la tasa de interés y quedó en 13,0 por ciento